Cuando nos cruzamos por la calle es posible que te reconozca, es cierto, pese a que habitualmente vigilo mis alrededores para evitar encontrarme con seres que me atemorizan, como un Lord Sith o Benedicto XIV (Benedicto reloaded). Es posible que ese día me cojas despistado y no me haya dado tiempo a cruzar de acera o esconderme detrás de un contenedor de vidrio, para no tener que aguantarte.
Así que lo de "¿Que tal?" Es una simple fórmula de cortesía. Sinceramente no me importa que tal estás. Y mucho menos si te empeñas en contármelo.
Sinceramente, no soporto a la gente que aprovecha cualquier excusa para ponerte al día de la operación de sífilis gonorréica de su marido, que este año se van de vacaciones a la riviera Maya (Pensando que se van a encontrar con la abeja y el zángano Willie), o que su hija ha aprobado todo con un "Notazón" y que el rey Juan Carlos I la ha recomendado personalmente para ser aceptada en la facultad de podología (La nena es muy humilde, y pese a su "Notazón", ha preferido estudiar podología, aunque ya le habían ofrecido una cátedra en la Academia Cervantes. Pero ella es así. Muy humilde).
ESCENA DE FRUTERÍA:
(Interior. Vemos un mercado con una frutería (Giro de guión inesperado), con gente esperando su turno).
FRUTERO: Buenos días, Doña Marisa, ¿Que tal?
MARISA: (Ha escuchado el "Que tal" y prepara toda la artillería que tiene a mano. Coloca las tropas de infantería (Bolsas de compra) en el mostrador, para impedir un desalojo rápido de su persona. El flanco izquierdo se aferra con fuerza al asa del carrito, en actitud defensiva. Observa su retaguardia, asegurándose de que ninguna generala enemiga pueda importunar sus dos minutos de gloria. Todo correcto. Código rojo activado): Pues tu me diras, un disgusto que tengo... La niña, que mira que ha sacado un "Notazón" en las oposiciones, ¿Eh? La cuarta de España y tercera de Alemania, que salió, la niña. De dos mil millones de personas, fijate que se dice pronto, que se presentaron a la oposición para funcionario del Ministerio (Así, en general), ella quedó la segunda. Y resulta que me la han destinado a Somormujos de la Potorra, en Cuenca. Porque, esto de oposición... ¡Nada! ¡Están amañadas! A ver si se va ya el Zapatero, hombre. Mira mi Jose, veinte años trabajando de taquillero en el metro, que trabajaba el como un animal, que el Metro funciona hoy gracias a mi Jose, que si no, de que, pues mira, con la de años que lleva, que los nuevos han aprendido todos de el, fíjate que se lo hacían todo, que el sólo iba allí a pasar lista. Pues hijo, al paro que me lo han enviado.
FRUTERO: Bueno, ¿Que va a querer?
MARISA: Pues lo que todas, hijo, ¿Que voy a querer? A ver si viene el Papa Ratzinguicto este que a ver si gana las elecciones el pobre mìo, y nos saca de la crisis, que no se done vamos a ir a parar.
FRUTERO: ¡Digo que que se va a llevar!
MARISA: Pues me llevo un disgusto que para que. Fíjate. La segunda en la oposición, que me sacó la niña, y eso que se presentaron doscientos mil millones de personas, que eran durísimas, de nivel mundial, fíjate...
Estoy repasando lo escrito. Y tengo que abandonar la seguridad de mi hogar para ir a por tabaco.
Tengo miedo.
"Con los dedos de las manos, con los dedos de los pies, con la picha y los cojones, todos suman veintitres".
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Se agradecen los comentarios.
Se agradece mas el sexo despiadado con Hale Berry, pero tus comentarios también.
Pero no tanto.