No me rindo, descubro una manera en la que es mas dificil ganar.

Desde que no dejan fumar en los bares, el Bar de Paco no es lo mismo. Bueno, si es lo mismo, hasta la tortilla sigue siendo la misma con la que inauguró el bar. Hace seis años. Me refiero a que el ambiente ha cambiado. Ahora ya no huele a tabaco, sólo a sudor y a perrete mojado. La única ventaja es que detectamos rápidamente cuando fríe las gambas con Fanta, porque no tiene limones naturales.

Así que deep in my jart, ahora digo "Que te debo, Paco" al principio de la conversación. Me subo el cubata a casa y hablo con un hamster disecado que tengo, recuerdo de mi tortuosa infancia.



Ahora me he abierto una cuenta en el Feisbum y otra en el Tiwister Sister y lo flipo en cantidades industriales.

Hoy una amiga a la que no he visto en mi vida, ha expresado su descontento por la intolerancia. Inmediatamente he apoyado su justo enojo. Yo también tengo amigos con intolerancia a la lactosa. Vivimos en un mundo donde podemos hablar con Japón en tiempo real y miles de personas no pueden consumir productos lácteos (Y cientos de personos no pueden ver películas porno).

Es triste. Greenpeace, Ayuda en Acción, El Refugio de Animales Abandonados, la Asociación Interestatal de Conejos Espachurrados en la Nacional II Madrid- Barcelona... Y nadie se ha preocupado jamas de la intolerancia a la lactosa de las vacas! Indignante!
Mi amiga, que alberga serias dudas sobre mi estabilidad mental, y la otra, me ha dicho que no sabe si las vacas comen leche y, de ser así, si les llega a afectar. Desde luego que no, las vacas, como mucho, se BEBEN la leche! No se la comen! Nadie se come la leche excepto el ser humano (Quesito en porciones) y las actrices de cine erótico (Las he visto hasta rebañar con pan). Se imaginan una vaca comiéndose a un humano en porciones? "El Humanito que Ríe".
Mi amiga tiene unas ideas rarísimas.

Me voy a aficionar a esto del Fisbaum. Ahora me voy al Twistter Pistter, que hay un hagstagh sobre #madridrojo que promete una noche interesante.



Con los dedos de la mano, con los dedos de los píes, con la picha y los cojones. Todos suman, veintitres.

Ubicación:Calle de Siena,Madrid,España